La importancia de la Psicología en nuestras relaciones

Psicología en nuestras relaciones

Cómo crear relaciones sanas. Seguro que esta cuestión ha rondado en alguna ocasión por tu mente. En especial si te apasiona, como a nosotros, la psicología.

¿Cómo conectamos, cómo interactuamos y cómo construimos vínculos con otras personas?, ¿Qué tipos de relaciones hay?, ¿Qué hacer para mantener vínculos fuertes y sanos con otras personas a lo largo de la vida? Son muchas las preguntas que pueden surgir alrededor de este tema.

Y a pesar de que no hay una respuesta única ni rotunda, porque cada relación es un mundo, si que hay ciertos puntos que podemos analizar para mejorar nuestras relaciones. Ya sea con una pareja, con amigos, con compañeros de trabajo o de estudios… Vamos a verlo. Eso sí, de forma breve porque este tema da para mucho.

Área de psicología

Concepto de las relaciones humanas

Una relación se basa en el vínculo que creamos con otra persona.

La forma en la que interaccionamos con otras personas, y por tanto los vínculos que creamos con ellas en función de los sentimientos o emociones que sentimos hacia ellas y que ellas sienten hacia nosotros, viene dada por varios factores.

Influye la cultura, las actividades sociales, la tecnología, los intereses, las emociones, los factores psicológicos, etc. Estas relaciones tienen su origen en la familia, en el colegio, en las empresas, en las actividades extraescolares y en las actividades sociales, etc. En cualquier lugar en el que coinciden dos o más personas que tienen una oportunidad para conocerse e interactuar entre sí.

Factores que influyen en las relaciones humanas

  • Horizontalidad. Cuando encontramos a alguien semejante a uno mismo, es más fácil que comience una relación entre ambos. Y es que por lo general nos atraen las personas que se parecen a nosotros. Nos sentimos reconfortados cuando encontramos personas que tienen nuestro mismo o muy similar modo de ver las cosas, de pensar, nuestros mismos gustos, nuestras mismas aficiones, etc.
  • Comunicación y comprensión. Si existe una buena comunicación entre dos personas, ya sean compañeros de trabajo, compañeros de clase, amigos, hermanos o pareja, etc. siempre será más sencillo que haya una relación sana. El lenguaje verbal y el lenguaje no verbal que establezcamos con la otra persona van a marcar el ritmo y la calidad de la relación. Y lo mismo ocurre con la empatía, nuestra capacidad para entender los sentimientos y emociones de otra persona también van a marcar la relación que se establece entre ambas.
  • Apego. No todos los vínculos son iguales. Y el tipo de apego que establecemos con otras personas viene dado en nuestra infancia. Es decir, el tipo de relación que se crea entre un bebé y su padre/madre/cuidador, sirve a dicho bebé como modelo de relación para crear relaciones con otras personas. Hay apego seguro, apego inseguro, apego ansioso, apego evitativo y apego desorganizado.

Relaciones interpersonales y personales

Las relaciones que establecemos con las demás personas influyen de forma directa en nuestro autoestima.

Tener empatía, evitar el conflicto, saber escuchar, la confianza, aceptar las diferencias, una interacción basada en el respeto… Todos estos son puntos clave que enriquecen las relaciones. Cuando los vínculos que tenemos con otras personas son positivos y nos hacen sentir bien, nuestra autoestima se refuerza. En cambio, cuando entramos en conflicto o sentimos que la otra persona nos ha fallado o ha hecho algo que nos perjudica, de forma automática nos sentimos mal.

Es muy difícil, por no decir imposible, que en una relación nunca surja ningún tipo de conflicto o discordancia. Y el objetivo de una relación sana no es evitar esto, sino saber afrontarlo con respeto hacia la otra persona y hacia uno mismo, para superarlo y fortalecer el vínculo.

La actitud que tomamos ante una discusión o un problema marca la calidad de la relación.

Desde el punto de vista de la psicología, ¿Qué oportunidades nos brindan las relaciones que establecemos con los demás? Por un lado, la oportunidad de conocerse mejor a uno mismo. Y por otro, la oportunidad de evolucionar. ¿Sabías que las personas que tienen relaciones sanas tienen una mejor calidad de vida? Son más felices, viven más, tienen una mejor emocional, física y mental.

Todo empieza en ti. Si quieres establecer relaciones sanas tienes que trabajar en ti mismo. Y los psicólogos ayudamos a conseguirlo, enseñándote las herramientas para que puedas realizar un viaje de introspección donde te encuentres y trabajes en áreas como la autoaceptación, el autocuidado, el autoconocimiento… Cuando consigues conocerte mejor, algo que no es fácil, consigues también conectar con las demás personas desde una perspectiva más saludable.

Relaciones personales y la Psicología social

Dentro de la psicología encontramos la psicología social, que se centra en el estudio de cómo las personas interactuamos en sociedad, cómo nos comportamos, y cómo pensamos y cómo actuamos en un determinado contexto social.

Las relaciones que mantenemos con otras personas tienen cierta influencia en cómo nos comportamos y en cómo es nuestra personalidad.

A través de la psicología social podemos conocer cómo los factores externos, los roles de cada individuo en la sociedad, la cultura, las normas y leyes, y las expectativas que cada persona tenemos, influyen en las relaciones.

Tipos de relaciones entre personas

Con cada una de las personas con las que interactúas tienes una relación distinta. Con cada una de ellas conectas, te comunicas y te influye de una forma diferente.

¿Qué tipos de relaciones entre personas hay? Entre ellas:

  • Relaciones íntimas o afectivas. Implican un alto nivel de intimidad tanto física como emocional. El amor, el respeto, la facilidad para la comunicación, un apego seguro, la confianza que se encuentra en la pareja, y el bienestar emocional que proporciona, son determinantes para la calidad de la relación.
  • Relaciones familiares. Estas relaciones se basan en un vínculo de sangre, un vínculo afectivo y que se crea desde que nacemos.
  • Relaciones de amistad. Son similares en muchos aspectos a las relaciones íntimas o afectivas. Sus bases son la confianza, el respeto, y el sentimiento de semejanza, entre otros.
  • Relaciones laborales. La relación que establecemos con otras personas de nuestra empresa, o con clientes, se basan en el respeto y en el trabajo en equipo.
  • Relaciones sociales. Estas relaciones al igual que las anteriores, también influyen en nuestro comportamiento y en nuestra autoestima, y son aquellas que establecemos con personas que no pertenecen a nuestro ámbito más cercano. Como el personal que te atiende en establecimiento o en un restaurante, con tu peluquero o con tu médico, con tus vecinos, etc.

El origen para mantener relaciones sanas está en uno mismo. Tener autoestima, sentirse bien con uno mismo es el primer paso para poder establecer vínculos con otras personas.

Si estás pasando por un mal momento a nivel emocional, en UAD Aragón podemos ayudarte. Contacta con nosotros y solicita ahora una cita con nuestros psicólogos en Zaragoza.

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